Sylvania - Transylvania (2015)
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Power Metal
Autoproducido
2015
Temas
1.- Transylvania
2.- Desátame 2.0
3.- Eagle Fly Free
4.- Finis Templarii
Formación
Guitarras y arreglos: Alberto Montoya
Bajo: Álvaro Chillaron
Batería y guturales: Sergio Pinar
Voces: Alfonso Arroniz
Crítica
Llega a mis manos el nuevo EP de los valencianos Sylvania, que adelanta lo que será el próximo trabajo de la renovada banda.
Lo primero que llama la atención es precisamente eso: El cambio de formación general que han sufrido y por el cual agradecen a todos sus seguidores el apoyo que les siguen ofreciendo y la confianza que les siguen brindando y es que no es para menos después del pedazo disco debut que se marcaron y que toma continuación con este nuevo aperitivo.
Por motivos de diferente índole, en la nueva formación únicamente se mantienen el alma mater a las guitarras, coros y arreglos Alberto Montoya y Álvaro Chillaron, incansable con un trabajo muy remarcable al bajo.
De la batería se encarga Sergio Pinar, hermano de la anterior teclista, el cual también se encarga de enriquecer de manera notable el conjunto con unos innovadores guturales en el sonido de la banda, además de aporrear de lo lindo y contundentemente la batería con especial mención a dobles bombos, nada planos y muy trabajados.
De las voces, hablar de un debutante en la escena como es Alfonso Arroniz. Un timbre de voz mucho más cálido que los de su antecesor con unas subidas agudas sencillamente perfectas. Diferente pero muy válido también para el conjunto.
Vamos pues al lío: El EP, que ha sido grabado los ya clásicos estudios especializados en power Fireworks Studios por Fernando Asensi y Enrique Mompó, contiene dos nuevos temas: Transylvania y Finis Templarii, una nueva revisión de la versión que ya realizaron en su día del famoso "Desátame" de Mónica Naranjo y su particular visión del "Eagle Fly Free" de Helloween.
"Transylvania" se trata de un tema que arranca mucho más crudo, potente y heavy que los mostrados en su debut "Lazos de Sangre". Orquestaciones oscuras y unas tenebrosas armonías que nos transportan a este nuevo mundo al que nos quiere llevar la banda.
Podría parecer un giro bastante rotundo en el estilo al contener ritmos más pesados y tonos menores con tétricas atmósferas, pero rápidamente un puente nos conduce de las estrofas a un más que pegadizo estribillo de tonos mayores que después solo de un par de escuchas, no podrás dejar de cantar.
Una rotura gutural de Sergio nos devuelve de nuevo a las métricas más oscuras contrastando de manera impecable las diferentes partes del tema. Sencillamente han abierto fronteras sin olvidar el sello que les llevó a un más que exitoso debut.
Los solos se encuentran en una rotura un pelín más progresiva adornada también con unos teclados, que deberán samplear en vivo, a la hora de finalizar apoteósicamente el tema con el estribillo llevado al límite.
El siguiente tema se trata de "Desátame 2.0", nueva visión del ya clásico versionado de Mónica Naranjo dentro del metal. Sencillamente vale la pena remarcar lo heavy que tiene ya de por si el tema, pues esta vez la banda ha optado por unos arreglos mucho más duros y personalizados, con unos cortes made in Sylvania de un estilo mucho más heavy que en su anterior versión, donde Sergio aporta una nueva faceta tanto con sus guturales, como en la batería, con un estilo muy propio.
"Eagle Fly Free" es un tema que no merece presentación, pues es parte de la historia del metal contemporaneo y que ha sido referencia en miles y miles de personas musicalmente. La banda ha optado por renir homenaje con su enfoque particular, manteniendo el espíritu original pero ofreciendo la versión sylvana del mismo, donde Alfonso demuestra que su registro es sobradamente alto y donde cabe remarcar los solos de Alberto y la rotura de tapping de bajo en la que Álvaro no solo reproduce, sinó que finalmente acaba dándole una nueva visión mejorando el original.
El que si merece la pena de un comentario más extenso es el segundo tema propio de la banda y que cierra este entrante: "Finis Templarii".
Un harpsichord abre el tema al cual se le suma el bajo de Álvaro antes de romper en un inicio muy al estilo Rhapsody, pero en sus buenos tiempos. La composición también me ha recordado en alguna parte, bien sea por la melodía, bien sea porque el canto de Alfonso tiene matices en su timbre que evocan a Víctor García, a Warcry, con lo que esto significa en el plano musicalmente positivo.
Pero no confundir "recordar" con ninguna otra cosa...y es que el estilo de Sylvania, aunque más potente, sigue la estela propia del grupo: Mucha melodía, muchos tonos mayores, grandes y rápidos solos con bastante técnica con sweap pickings y tappings encajados a la perfección y estribillos fáciles de escuchar, cantar y repetir!
En conclusión, la banda nos regala un aperitivo lo suficientemente corto como para ponernos los dientes largos pero importante al recordarnos que siguen al pie del cañón frente las adversidades sin ningún miedo a la hora de afrontar esta nueva etapa de la banda y sabiendo enriquecerse de los nuevos músicos que toman parte en esta aventura.
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