Tokio Hotel - 12/03/25 - La Riviera (Madrid)
Parece que fue ayer cuando la “tokiohotelmanía” inundaba el mundo. A principios de los 2000, la jovencísima banda de rock formada por Bill Kaulitz (voz), Tom Kaulitz (guitarra), Georg Listing (bajo) y Gustav Schäffer (batería) hizo nacer un multitudinario fenómeno fan, sólo comparable al de los Beatles en su día.
Dos décadas más tarde, Tokio Hotel sigue despertando las mismas pasiones. Esto se pudo comprobar el pasado miércoles 12 de marzo en La Riviera (Madrid).
El grupo se dio cita en la capital como parte de su gira europea “The Tour 2025”, fecha en la que consiguieron colgar el cartel de “sold out”, casi desde el momento en que salieron a la venta las entradas.
Poco importaron las bajas temperaturas de ese día, el fuerte viento, o que fuese un día entre semana. Nada impidió a los fans hacer fila desde primeras horas de la mañana para ver al cuarteto alemán. Y es que ser fan tiene su parte de sacrificio.
Desde varios puntos de España, e incluso de otros países como Italia o Francia, miles de fans acudieron a la cita con el grupo, que no pisaba la capital desde 2019.
Antes de la hora de comienzo, miles de seguidores impacientes gritaban ante un escenario aún vacío y con el telón bajado. En torno a las 20:00, y con los nervios a flor de piel, las luces se apagaron, y subieron los decibelios de los gritos de forma considerable.
Subidos en tarimas, y con el vocalista vestido con unas grandes alas y traje brillante, arrancaron con “Miss It (At All)”. Apenas había comenzado el concierto y la locura ya estaba desatada.
La locura no fue menos con “Dark Side Of The Sun” y The Heart Get No Sleep”. Los fans demostraron una entrega increíble desde el principio, lo cual sólo puede venir de los seguidores más incondicionales.
El show continuó con “Girl Got A Gun”, con unos visuales coloridos muy currados, que se mantendrían en todo el concierto. En “Love Who Loves You Back”, Billl sorprendió con el primer cambio de vestuario, un traje brillante rosa chillón con sombrero a juego. A este le siguieron algunos cambios más.
Aunque hayan cambiado el rock, el eyeliner, el pelo cardado y el color negro por lentejuelas, luces de neón y un estilo más glam y colorista, Tokio Hotel siguen siendo la misma banda que levanta pasiones allá donde va.
Así lo demostraron los allí presentes. Ningún fan perdía la oportunidad de saltar, bailar e inundar la sala de gritos y coreos, con cualquier canción.
La banda también se mostró entregada con el público. El cantante, muy simpático en todo momento, recordó todos los años que llevan en activo, y agradeció a todo el fandom por haber permanecido a su lado durante toda su trayectoria.
A continuación, sorprendieron con su nuevo tema “Hands Up”, y mostraron su lado más alegre y fiestero con “Feel It All”. Tampoco faltó sentirse “como en casa” con “Home”, de su serie de Netflix ‘Kaulitz & Kaulitz’, y con “Easy”.
A mitad del repertorio, se permitieron bajar las revoluciones y hacer un set acústico a guitarra y voz con “Just A Moment” e “In Your Shadow (I Can Shine)”.
Todo ello acompañado de una excelente puesta en escena, muy reseñable en todo el show. Potentes luces de colores en unos temas, humo y manto de estrellas en otras… No se les escapó nada.
Como no podía ser de otra manera, reservaron algunos momentos para que surgiera la nostalgia. Así ocurrió con “Rette mich”, emocionante balada de su primer disco, que no dejó a nadie si corear.
Aunque más emocionante fue “Spring nicht”. La poderosa balada de su segundo disco, tan significativa para muchos fans, hizo incluso que cayera alguna lágrima. La sección instrumental tuvo también la ocasión de lucirse en este tema.
Tokio Hotel demostraron que no dejan de ser una caja de sorpresas, y por eso se lanzaron a hacer varias versiones: “Fahrt mit mir” (Kraftklub), “Fata Morgana” (Nina Chuba), y hasta “Careless Whisper” (George Michael), en que Bill se atrevió con el keytar.
Asimismo, merece la pena señalar que tanto el bajista como el guitarrista no se conforman ya con dominar su instrumento, sino que ahora también se lanzan con los sintetizadores.
Por si fuera poco, deleitaron al público con una cañera versión de “Colors Of The Wind”, de la película de Disney ‘Pocahontas’. Cos temas “What If” y “White Lies” echaron el cierre al repertorio.
Pero por supuesto, no podían irse sin tocar su mítico “Monsoon”, que tanta fiebre fan despertó en su día. Con efectos visuales de relámpagos y proyecciones de su primer videoclip, la banda sumió a La Riviera en su “tormenta”, e hicieron aflorar muchos recuerdos.
Kaulitz quedó impresionado de que la sala entera supiese al milímetro la letra de la canción, aun cuando ellos ni siquiera estaban tocando y dejaron al público tomar lar riendas. Entrega hasta el final.
Después, pusieron el broche al concierto con “Great Day”. Un buen resumen de lo que había sido el día, la verdad. Tokio Hotel dejaron bien satisfecho a su público, con un extenso concierto muy bien trabajado a todos los niveles, y grandes dosis de nostalgia para los fans de la vieja escuela.
Agradecimientos especiales a Route Resurrection!
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