Entrevista con Elder: El viaje interior del sonido
Desde sus inicios en Massachusetts en 2006 hasta su consolidación actual en Berlín, ELDER se ha convertido en una de las formaciones más visionarias del rock contemporáneo. Su sonido, a medio camino entre el stoner, el doom y el rock progresivo, ha evolucionado desde los primeros rugidos psicodélicos de sus primeros trabajos “Elder” (2008) y “Dead Roots Stirring” (2011), hasta los paisajes expansivos y atmosféricos de “Innate Passage” (2022). Con Nick DiSalvo al frente —voz, guitarra y mente creativa—, la banda sigue explorando territorios donde la pesadez se funde con la introspección. ELDER no solo propone música para el cuerpo, sino también para la mente: un viaje sonoro que desafía los límites del género y el tiempo.
JORDY STANLEY: Muy buenas chicos. A lo largo de los años, ELDER ha transitado desde el stoner más denso hasta un sonido progresivo y atmosférico. ¿Cómo describiríais ese proceso de transformación?
ELDER siempre ha sido una banda centrada en el rock pesado, pero nuestra forma de entender la música ha cambiado con los años, a medida que nos hemos convertido en músicos más ambiciosos y con intereses más amplios. El techo de lo que se puede hacer dentro del género stoner/doom es bajo. Nos resultó natural explorar fuera de esos límites. Además, los miembros de la banda venimos de contextos musicales muy diversos, así que hay mucha variedad entre los cuatro, y eso se filtra inevitablemente en lo que hacemos. Al final del día, simplemente componemos música que disfrutamos.
J.S.: Desde Massachusetts a Berlín hay un salto cultural enorme. ¿De qué manera ha influido ese cambio de escenario en la música y la dinámica del grupo?
Para mí, la experiencia de mudarme a otro continente trajo muchos desafíos y recompensas que impulsaron mi crecimiento personal, lo cual, a su vez, influyó en nuestra música. Del mismo modo que pasar una semana recorriendo montañas puede inspirarte, creo que un cambio de entorno influye en la música que haces. Además, el hecho de que Berlín sea una ciudad vibrante, con una gran escena musical y artística, mucha gente interesante y diversa, y situada en el corazón de Europa, nos ha expuesto a muchas cosas que sin duda han cambiado nuestra forma de pensar la música.
J.S.: Este cambio del que me hablas, esta nueva manera de entender las cosas, se ve en vuestros discos, por ejemplo “Lore” o “Omens” parecen tener una narrativa interna, casi filosófica. ¿Qué papel juega el concepto en vuestras composiciones?
A veces las canciones se desarrollan únicamente a nivel musical, sin pensar en absoluto en las letras, y otras veces ocurre justo lo contrario: una idea temática proporciona el marco para la canción. Para mí es importante que nuestra música tenga algo que decir a un nivel más profundo, algo que, en el mejor de los casos, invite al oyente a reflexionar.
J.S.: En este sentido, muchos fans destacan la capacidad del grupo para equilibrar técnica e introspección. ¿Cómo encontráis ese punto medio sin perder intensidad ni emoción?
Creo que ELDER ocupa un terreno intermedio poco común en ese sentido, y eso es precisamente lo que hace única a la banda. Al final todo se reduce al gusto personal. No soy fan de la música que es técnica solo por el afán de presumir, pero por otro lado, debe haber cierto nivel de destreza y creatividad que mantenga las cosas interesantes. Nos esforzamos al máximo para que no haya momentos desperdiciados en un disco.
J.S.: ¿Qué buscáis, pues, al entrar al estudio? ¿Una composición que pueda ser una reproducción fiel en vuestro directo o un espacio más experimental para construir nuevas atmósferas?
En los últimos álbumes, normalmente hemos tenido todo meticulosamente planificado, con una preproducción muy detallada, de modo que cuando entramos al estudio ya sabemos exactamente lo que buscamos. Sin embargo, en el último EP, fue donde realmente construimos parte de las canciones en el estudio a base de experimentar. Fue genial cambiar el enfoque y mantener el proceso fresco e interesante.
J.S.: Hablando de cosas de estudio y de cambiar enfoques, el proyecto ELDOVAR, junto a KADAVAR, sorprendió a muchos. ¿Cómo surgió esa unión y qué aprendisteis de trabajar con otra banda de vuestro nivel creativo?
Durante la pandemia, visitamos el estudio de KADAVAR para ver si grabaríamos allí nuestro próximo disco. Mientras estábamos allí, ellos propusieron la idea de juntarnos a improvisar. Llevamos nuestro equipo, lo montamos junto al suyo, colocaron algunos micrófonos y nos pusimos a tocar durante unas horas. Después todos coincidimos en que podríamos sacar algo interesante de aquello, y así nació el proyecto. Fue fascinante ver cómo desarrollan su proceso creativo, lo espontáneos que son y qué importancia dan a ciertos elementos de una canción. Esas sesiones me desafiaron a explorar más en mis propias inquietudes musicales, especialmente en lo vocal.
[p]J.S.: ELDER tiene una base de seguidores muy fiel, especialmente en Europa. ¿Notáis diferencias entre los públicos americano y europeo?
Hay diferencias entre los públicos de todo el mundo, incluso entre distintas zonas de Europa o de un estado a otro en EE. UU. En algunas ciudades la gente se vuelve completamente loca; en otras, permanecen con los brazos cruzados, asintiendo y disfrutando la música de forma tranquila. Nuestros seguidores suelen ser personas muy apasionadas, y muchas veces esas interacciones se convierten en amistades a largo plazo, porque viven la música con la misma intensidad que nosotros.
J.S.: Tras “Innate Passage”, ¿en qué punto se encuentra ELDER? ¿Estáis trabajando ya en nueva música o explorando nuevas direcciones sonoras?
Estamos trabajando en el próximo álbum en el estudio y apuntamos a lanzarlo a comienzos del próximo año. Como siempre, será algo nuevo, pero todavía no puedo revelar cómo.
J.S.: Después de casi dos décadas de carrera, ¿qué habéis aprendido sobre el equilibrio entre la ambición artística y la libertad personal?
Hasta cierto punto, tienes que sacrificar gran parte de tu vida para dedicarte a la música a tiempo completo. Es difícil planear otras cosas cuando solo piensas en la próxima gira o el próximo disco. He aprendido que necesito ser muy consciente de lo que realmente quiero expresar artísticamente, para no dejar que se convierta en un medio para un fin, en lugar del propio propósito de crear.
J.S.: En nada venís a nuestro país. ¿Qué podéis decirles a vuestros fans españoles?
¡Hola! Tenemos muchas ganas de ver a nuestros amigos españoles muy pronto.
Gracias chicos. Nos vemos en nada. Keep on Rocking!
30 de octubre de 2025 — Bilbao, D8 Sorkuntza (como parte de una gira con “All Them Witches”)
Suscríbete aquí!