Butcher Babies + Astray Valley – 27/6/2023 - Sala Salamandra (L'Hospitalet (Bcn))
Como os decía hace unas semanas, el mes de junio es el mes de los metaleros: festivales, conciertos a go go, eventos… ¿Qué más podemos pedir? ¡Pues el conciertazo que vivimos ayer en la Sala Salamandra!
La noche comenzaba a eso de las 20:30, más o menos, con la apertura de puertas. La cosa fue ágil, pues no había mucha gente esperando. Y lo cierto es que en Barcelona quedamos los pocos metalheads que no vamos al RESSURRECTION FEST, donde también tocarán BUTCHER BABIES, entre muchos otros. Pero vayamos por partes, como proclamarían nuestras carniceras favoritas.
Como decía, la cosa fue bastante ligera en todos los sentidos, entrada rápida y los teloneros, ASTRAY VALLEY, saliendo puntuales a por su actuación. Y aunque la realidad es que ASTRAY VALLEY eran quienes teloneaban a las ‘carniceras’, se marcaron un bolazo de órdago. Para quienes no les conozcan, esta es una banda fundada en 2015 en la ciudad de Barcelona, formada por Clau Violette a la voz, Joan Vena y Adrià Funerailles, a las guitarras, Álex Albano al bajo y Unai Splinters a la batería.
Pues como os decía, desde el primer momento, sonaron muy bien, súper nítidos, se podía apreciar cada uno de los matices de los riffs de guitarra de Joan y Adrià y cómo acompañaba Mr. Albano las melodías en su bajo de cinco cuerdas; la batería de Unai, imparable. Y qué decir de la voz de Clau. Creo que más de uno nos quedamos prendados de cómo alternaba los tonos melódicos con unos potentísimos guturales.
Los barceloneses nos ofrecieron, fundamentalmente, los temas de su nuevo lanzamiento, Tales of Lun (2021), además de algunas de las mejores canciones de su álbum anterior Unneth (2018). Diez temazos cayeron anoche, en los que Clau actuó como la gran frontwoman que es y la banda la respaldó con energía y actitud a raudales. Desde mi punto de vista, es una de esas grandes bandas que acabas conociendo gracias a estas oportunidades, que se consiguen mediante el esfuerzo y el trabajo diario. Chicos, desde aquí os seguiremos la pista de bien cerquita.
Y tras una horita, más o menos, de buena música, tocaba lo que todos habíamos venido a buscar. Una potentísima descarga de metal a cargo de las BUTCHER BABIES. ¡Y eso es lo que nos dieron! ¡No defraudaron para nada! Las angelinas comenzaron a repartir estopa desde un principio, con temas como Red Thunder y Best Friend, seguido de la brutalísima Monster Ball.
Lo que más me gustó de ellas fue que entre canción y canción, desplegaban un buen rollismo impresionante. Hablaban con el público, nos animaban a corear y a aplaudir todas las canciones. ¡Barcelona, let me hear you! La verdad es que, desde la segunda canción, nos habíamos convertido todos en ‘best friends’, como Heidi nos iba diciendo, pues era ella quien llevaba, más bien, la voz cantante en cuanto a la presentación de los temas y a la interactuación con el público. Sin prisa, pero sin pausa, fueron cayendo temazos como Sleeping With the Enemy, Gravemaker o BEAVER CAGE, todos y cada uno de ellos, presentados con simpatía a raudales por parte de Heidi y Carla. De verdad, flipé muchísimo con su empatía y con la energía positiva que transmitían en todo momento. Y quiero incidir en ello, porque un concierto de metal no es solo mover la cabeza arriba y abajo, y hacer los cuernos con la mano. Pienso que es una fiesta. Y ayer tuvimos fiesta para rato. Y lo mejor es que fuimos partícipes de ella (si al final, incluso, acabaron brindando con Jägermeister, en un último speach en donde nos felicitaban por nuestra actuación como público, because, Barcelona, now we are Best Friends, ever). Éramos pocos, ya lo hemos dicho más arriba, pero los que estábamos salimos, creo yo, sin excepción, satisfechos con el concierto, con la noche y con la dosis extra de endorfinas que nos propinaron las BUTCHER BABIES.
En cuanto a la banda en general, sin fisuras: compacta como un carro de asalto. Las guitarras de Henry Flury, super saturadas, ofreciendo una dosis extra de contundencia. Y la base rítmica, marcada por Ricky Bonazza, al bajo, y Chase Brickenden, a la batería, zarandeándonos a todos sin remedio. De Heidi y Carla, ¿qué más puedo decir? Si como frontwoman son excepcionales, como cantantes son “la ostia”, con perdón de todos los que estáis leyendo estas líneas. La manera en como combinan el fraseo de los temas entre ellas y, además, intercalan el gutural con el melódico es algo que solo encontramos en BUTCHER BABIES. Marca de la casa. ¡Insisto! Metal de calidad, contundente, extremo, bien hecho y, además, con una carga positiva que recordaremos durante mucho tiempo.
Long live to Rock and Roll!!!
Long live to BUTCHER BABIES!!!!
Las más leídas:
Suscríbete aquí!