Ankor + Vukovi + Far'n'Hate - 08/03/2024 - Razz 2 (Bcn)
El pasado sábado 8 de marzo, fuimos toda la familia a ver a la banda tarraconense Ankor, que tocaba junto a los ingleses Vukovi y lo hacían coincidir con el regreso a los escenarios de Far'n'Hate. Lo hacían en Razzmatazz 2, una sala lo suficientemente grande y ambiciosa como para demostrar el enorme crecimiento de la banda y consumar el éxito, sobretodo a nivel internacional, que están cosechando.
Recientemente, entrevisté a David y a Jessie y les pregunté si en esta gira intentarían girar la tortilla ante el dicho de que nadie es profeta en su tierra, y su respuesta fue, que aunque a ganas, esfuerzo y entrega, nadie les ganaría, mucho se temían que no iba a ser así. Menuda alegría ver como se equivocaron de cabo a rabo y no solo en la noche que nos ocupa, sino en todas las que iban a tener lugar durante la gira.
Por suerte, fuimos con tiempo, mucho tiempo, porque el recorrido que puede ser de unos 20 minutos máximo, llegó a ser de prácticamente dos horas, por el cierre de un montón de calles en la ciudad condal, debido a las diversas manifestaciones por el día de la mujer y al llegar una cola que nos retrasó la entrada durante el primer tema de los gerundenses.
Con el único pero, del sonido bastante alto, más de lo que nos hubiera gustado, disfrutamos de la entrega de Far'n'Hate. Un nu metal pesado, moderno, con muchas partes melódicas y sin bajista en escena. Una resurrección en toda regla y es que los liderados por Marc Camargo salieron a darlo todo.
Algunos clásicos de la banda con buena experiencia internacional como "Always Overcome" o "Deathwish", fueron los encargados de desparramar toda la entrega sobre el escenario con esa fuerza que les precede. Bajo, que aunque pinchado, atroz y dos guitarras bien graves y potentes las que hacían sonar Nacho Merino y Felipe Cerda.
Esquinado en un lado pero protagonista por, entre otras cosas, su cercanía a la primera linea, la batería de Jona de Haro atronaba implacable a ritmo de "Change".
Marc preguntó al público, quien les había visto antes y lo más importante, quién querría repetir, en un show más largo donde la banda tuviera más protagonismo que la escasa media hora de la que dispusieron. Muchas manos alzadas ya esperan el próximo despliegue en vivo a las puertas del verano.
Tras lo cual, con la interpretación del que es su última tema (con videoclip incluido), Beyond the Edge, pusieron punto y final a una actuación, que lo que más me sorprendió fue lo que enganchó a parte del público y más concretamente a mi hija pequeña, que rompiéndose el cuello a ritmo de los breakdowns de la banda, pedía más.
Tras una buena pausa, salieron a escena el dueto escocés, convertido en trío para el directo Vukovi. No conocía de nada a la banda, aunque me había dicho cosas buenas, en especial de su directo y entendí el porqué. Si Hamis Reilly, con su guitarra es un torbellino, parece una estatua de bronce en comparación con la fronwtwoman Janine Shilstone. Un no parar, de saltar, de bailar, de moverse y por supuesto de cantar, que contagiaban a la sala, que tenía un aspecto magnífico ya en cuanto a afluencia de público se refiere.
Vukovi practica un metal moderno, con muchos toques de pop, sobretodo vocales, toques (siendo generoso) de electrónica y mucha potencia. La batería, con músico de directo en vivo (se agradece) era muy llamativa por el pelo rizado, que tanto me recordó al de Stop, sTop, Danny Spasov. Bajo lanzado también, pero junto a toda la electrónica y otros sonidos entre los que se encontraban (quizá demasiado exageradamente para mi gusto), coros y apoyos de voces; aunque lo que habías venido a ver, lo veías: Un desparrame de música, movimiento y una originalidad en un metal muy moderno, con una propuesta diferente a lo que al menos yo, estoy acostumbrado.
No puedo opinar demasiado sobre los temas concretamente, pero sí puedo hablar de un público entregado, bastantes interacciones,... una Jeanine que saltaba, cantaba, bebía cerveza a alto ritmo y encandilaba a los asistentes y un show más que atractivo y de algunos temas, que me llamaron la atención, no sé si por sí mismos, o por la entrega generada delante del escenario, como son Kill It y I Exist o bien con la que cerraron en modo apoteosis: La Di Da.
Finalmente llegaba la hora del verdadero motivo por el que estábamos allí: Empezaba el show de Ankor, una banda que hemos visto crecer des prácticamente sus inicios (antes de la salida de My Own Angel!) y a la que teníamos especial cariño. Hacía tiempo que no les veíamos en sala y se me erizaba la piel de ver una Razz 2 (aunque fuera en su versión de cortinas echadas), con un aforo completo (y sinó, sería por poco).
Mis peques, emocionadas, saltaron desde el principio al fin, una escabulléndose hasta las primeras filas y la otra haciéndome que las sesiones de gimnasio parecieran una risa, sobre mis espaldas.
La totalidad del repertorio, fue de sus últimos lanzamientos y es que teniendo unas 70 canciones donde elegir, pues es lógico dar valor a lo más reciente. "Lost Soul" perteneciente al Beyond the Silence of these years y daba el pistoletazo de salida con un sonido excelente y una banda que salió a darlo todo desde el inicio: Jessie saltaba, interactuaba, sonreía y cantaba nítido y claro, gutural, rasgado, rapeaba e incluso esa especie de lamento infantil que tanto adorna los últimos temas.
A lo grande saltaban con uno de sus grandes éxitos recientes: "Nana". David disfrutaba, ayudaba en coros y sonreía sin dejar de hacer el gesto de corazón con las manos 🫶🏼, siempre que la guitarra se lo permitía, guitarra que interpretó con una solvencia encomiable.
Primer de los temas de la última tanda "Darkbeat" y locura. La gente cantaba, sonreía y entró en comunión con la banda. Julio, al bajo (el único bajista de la noche) lo dio absolutamente todo, hasta el punto que se rompió las fibras del gémelo y tuvo que hacer una pausa para reponerse (ante la perspectiva de completar el resto de la gira lesionado!), ese era el nivel de entrega!
Uno de los temas más potentes e incluso "violentos" musicalmente hablando de la banda, al menos hasta la fecha y la publicación de "Venom", fue el encargado de recibir los primeros moshpits: "The Legend of Charles the Giant". Si hay una cosa que no ha cambiado porque es imposible es la locura y la entrega que ofrece Fito en el escenario. Es que sencillamente, es imposible dar más y eso a la gente, le encanta. No olvidó además, una momento para ofrecer un recuerdo a la figura del creador de Bola de Drac, Akira Toriyama, haciendo gritar a pulmón la introducción de la serie en catalán, que es como se hizo popular por estas tierras.
Un concierto largo, y aún así, ganas de más!!! Destacaría por ejemplo el tema "Shhh...(I'm Not Gonna Lose It)", con discurso previo de Jessie en favor de la música en general sin tanto estereotipo o "Holy Wolf", por ejemplo, pero hay una cosa que quedó clara: Finalmente sí han sido profetas en su tierra! Qué bolazo! Qué profesionalidad y que gusto ver algo así! Qué bien lo pasamos nosotros, y todos los asistentes, que demostraron sobradamente estar al día en cada una de las publicaciones que la banda nos va ofreciendo en este nuevo formato de gota a gota.
Ah! Y no se me puede olvidar: Primera vez que presencio en directo a Eleni Nota. Tenía muy buenas referencias de ella, pero no eran exageradas! Menuda manera de llevar la batuta del concierto, y demostró estar sobrada de técnica, tanto en su solo (aún a pesar de ser la primera lesionada de la banda, lastimándose al subir al escenario) como en cada uno de los temas, haciendo especial mención al que cerró el concierto: Y es que "Venom" es muy nuevo, es muy potente y es MUY rápido! Y la gente, rápidamente lo reconoció a pesar de los reciente de su lanzamiento y siguió las instrucciones para corear hasta el final la parte más tranquila!
No puedo expresar con palabras el concierto en sí, no sé describir bien la entrega de la banda ni mucho menos la comunión que vivió con el público, pero desde luego lo he intentado y una muestra de ello, es que al finalizar, se hicieron la foto finish, sonó pinchada su versión de "Bad Guy" mientras ellos bailaban en el escenario y absolutamente nadie se movió de allí, coreándoles, acompañándoles y disfrutando de esos últimos instantes vividos. Sencillamente, un concierto en mayúsculas del que disfrutamos de lo lindo.
Finalmente explicar, que no pude salir de la sala, hasta que mi hija pequeña consiguió saludar a Jessie, luchando contra el cansancio y el sueño de una niña de menos de 6 años, pero que vivió intensamente y disfrutó como cualquiera de los adultos allí presentes! Grandes Ankor, una de las bandas más en forma y más grandes ahora mismo en nuestro país...
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