Ignis Anima - Bajo el yugo del tiempo (2018)
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Folk / Power Metal
Autoproducido
2018
Temas
1. Tempus fugit
2. Cicatrices
3. Píramides de sangre
4. Heraldo del hombre
5. Leyendas de sal y marea
6. Bushido
7. Eurídice
8. No es sólo música
9. Santa ejecución
10. Alma en llamas
11. Tierras estériles
12. Tras la última frontera
13. Bajo el yugo del tiempo
14. Arde Valhalla
Formación
Voz: David Isidro (Izzy)
Guitarra: Ricardo Mera (Ric)
Guitarra: Jorge Gómez
Bajo: Iván Martí
Violín: Mercedes Olmeda
Batería: Sergio Borges (Mini)
Crítica
Han transcurrido varios años desde el lanzamiento de esta obra discográfica, es cierto. Sin embargo, no podemos dejar pasar la oportunidad de destacar un álbum que sin lugar a dudas impactó de lleno en el mundo del Power Metal. Ignis Anima, surgido en el año 2012, marcó el punto de partida cuando el guitarrista y cantante Izzy se unió al virtuoso guitarrista solista Rik. Este dúo inicial evolucionó hasta convertirse en el sexteto que conocemos en la actualidad, consolidando así una carrera vertiginosa en una simbiosis musical frenética que queda plasmada en su discografía. Desde el lanzamiento de su primera demo, "Albores de Guerra" (2014), Ignis Anima demostró su potencia musical al sentar las bases del estilo que los caracteriza. Este disco enérgico sentó los cimientos para su trayectoria artística. Su música se ha erigido como una declaración de fuerza y creatividad en el género del Power Metal, atrayendo a seguidores y críticos por igual. A lo largo de los años, Ignis Anima ha trascendido las expectativas iniciales, ganándose un lugar destacado en la escena del metal. Su sonido ha evolucionado desde los primeros días de "Albores de Guerra", madurando en complejidad y profundidad a medida que la banda ha crecido y explorado nuevos horizontes musicales. La resonancia de su música y la pasión que inyectan en cada canción demuestran que su compromiso con la excelencia artística es inquebrantable.
"Bajo el Yugo del Tiempo" emerge como el fruto de un éxito rotundo en su campaña de crowdfunding, un logro que supera con creces todas las expectativas. El álbum ha cobrado vida en los prestigiosos Estudios Fireworks, donde cada nota ha sido cuidadosamente esculpida para obtener una calidad sonora impecable. Este entorno de producción ha sido la forja donde la esencia de cada melodía ha sido pulida hasta alcanzar la perfección auditiva. Un aspecto que resalta de manera notable en "Bajo el Yugo del Tiempo" es su portada, que se desmarca audazmente de los convencionalismos del género. En un refrescante contraste con las típicas representaciones de dragones y caballeros, la elección ha sido tomar un camino más sutil y acorde con el propio título del álbum. Esta decisión no solo sorprende gratamente, sino que también añade un nivel adicional de profundidad y significado a la obra en su conjunto.
En lo que respecta a las letras creadas por David, estas traspasan una amplia gama de escenarios y emociones, lo que agrega una dimensión adicional a la riqueza del álbum. Un ejemplo de esta diversidad es la trepidante y galopante "Heraldos del Hambre", donde las letras exploran temáticas religiosas con un toque vertiginoso. En esta pista, la colaboración vocal de Juanba Nadal (Dragonfly) añade un matiz distintivo, fusionando sus voces de manera magistral para potenciar la intensidad del mensaje transmitido. Un giro inesperado nos lleva a las aguas y las aventuras de los piratas en "Leyendas de sal y marea", donde las letras desentrañan las vidas ásperas y desafiantes de estos intrépidos marinos. El contraste entre la vida en alta mar y la búsqueda de tesoros, junto con las luchas internas de los piratas, crea una narrativa cautivadora que sumerge al oyente en un mundo lleno de adrenalina y peligro.
En un tono más melancólico y emotivo, "Eurídice" se alza como una balada que evoca destellos de la antigua historia griega. Las letras reviven los pasajes de la mitología griega, trayendo a la mente la trágica historia de Eurídice y Orfeo. A través de estas letras, Ignis Anima no solo muestra su habilidad para abordar temas épicos y épicos, sino que también demuestra una destreza notable para capturar la esencia emocional de estas historias atemporales.
Este abanico de temáticas y escenarios que abarcan las letras de David enriquece la experiencia auditiva del oyente, transportándolo a través de diferentes épocas y emociones. Desde la frenética intensidad hasta la melancolía y el suspenso, "Bajo el Yugo del Tiempo" se convierte en un viaje no solo musical, sino también lírico, que invita a los oyentes a explorar y reflexionar sobre una diversidad de historias y sensaciones que conforman el tapiz artístico del álbum.
Dentro del conjunto de canciones que conforman el álbum, se destacan momentos que resplandecen con una brillantez propia y que enriquecen la experiencia auditiva. La introducción del disco a través de la exuberante melodía de la instrumental "Tempus fugit" es como una puerta de entrada a un viaje musical emocionante. Esta pieza instrumental establece una atmósfera inmersiva que capta la atención del oyente desde los primeros acordes, preparándolo para el viaje sónico que está a punto de emprender. En "Cicatrices", la banda logra una ambientación powermetalera que evoca imágenes épicas y emociones intensas. El equilibrio entre la instrumentación poderosa y las letras apasionadas crea un puente entre la música y las historias que se cuentan, atrapando al oyente en un torbellino de energía y emoción.
La pista "Pirámides de sangre" comienza con un toque arabesco, que inmediatamente establece una atmósfera única. La mezcla de este comienzo distintivo con potentes coros aporta una dinámica cautivadora a la canción, mostrando la habilidad de Ignis Anima para fusionar elementos diversos en una obra coherente. "Bushido" sorprende con una transición fugaz desde una sensación inicial que recuerda a Black Sabbath, evocando un aura oscura y misteriosa, para luego desencadenar en una típica cabalgada característica del género. Este juego de contrastes enriquece la canción y muestra la versatilidad creativa de la banda.
Por otro lado, "No es sólo música" presenta un acelerón guitarrero que inmediatamente atrapa la atención. La agudeza de las guitarras y la fuerza de la instrumentación dan vida a una canción afilada y poderosa que muestra la maestría técnica de los músicos. El álbum culmina en un apogeo frenético con "Arde el Valhalla", donde las historias del Norte se despliegan en una vorágine de emociones y sonidos. La pista no solo cierra el álbum con una explosión de energía, sino que también reafirma la habilidad de Ignis Anima para contar relatos épicos y llevar al oyente a través de un viaje emocional.
En definitiva, el álbum se revela como un tesoro de detalles y momentos cautivadores que convencen con firmeza de su calidad. Cada canción aporta su propia esencia al conjunto, creando un mosaico sonoro que demuestra el talento y la dedicación de Ignis Anima en la creación de una obra que sobresale y perdura en el panorama del Power Metal.
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